Esta expresión se usaba hace siglos para avisar a los transeúntes de que un vecino iba a vaciar su escupidera, su barreño o el agua de fregar por la ventana. A partir de esta expresión, la Agrupación de Teatro de Filología propone un pequeño espectáculo sobre los finales de escenas teatrales y de cuento más conocidos para jugar a la sorpresa de un nuevo final cuando su máxima tensión se ve remojada por un ¡Agua va!... Es un trabajo sobre el juego pasado por agua.